Ciudades Bíblicas e Históricas

Los filisteos eran una nación guerrera “descendientes de filisteim, a travéz de Casluhim,” hijo de Mizraím (Gén. 10:13,14), que  procedían de “Caftor, que probablemente es la isla de Creta”. Más tarde, cuando el patriarca Abraham “habitó la ciudad de Gerar” que se encontraba en el sud-este de Palestina (Gén. cap. 20); tanto él como su hijo Isaac tuvieron serios problemas con ellos por unos pozos, que habían cavado (Gén. 21:25-34 ; 26:1-18). Eran una nación guerrera, siendo esta la razón por la que Dios no llevó al pueblo de Israel por territorio de ellos, cuando los liberó del yugo egipcio (Ex. 13:17). En la época de Josué, la nación filistea estaba dividida en cinco ciudades-estados con sus territorios, y “un rey en cada una de ellas” (Gaza, Asdod, Ascalón, Gat y Ecron: Jos. 13:2, 3). 

   Asdod era el orgullo militar de los filisteos, esta ciudad estaba construía sobre una colina rocosa y de forma redondeada, y muy protegida de cualquier ataque enemigo. Se encontraba bastante cerca de Ascalón y de la ciudad judía de Asdod. La cumbre de esta colina tenía visibilidad de toda la zona y eso les permitía vigilar y contra atacar a sus enemigos. También se dice que eran idólatras y muy supersticiosos, y tenían varios templos donde adoraban y rendían culto a Dagón, y entre ellos; Ascalón era el principal centro de adoración de Astoret (diosa pagana), y Ecrón era la sede de Baal-zebud (1 sam. 5:2 ; 2 R. 1:1-16).