= Saulo de Tarso, era aquel que perseguía a la iglesia =
= Posiblemente por esta razón, él mismo cambió su nombre.=
= Saulo ahora como el Apóstol Pablo =
Habiendo zarpado de Pafos, Pablo y sus compañeros arribaron a pergen de Panfilia; pero Juan Marcos, apartándose de ellos, volvió a Jerusalén. Ellos, pasando de Perge, llegaron a Antioquía de Pisidia; y entraron en la sinagoga un día de reposo y se sentaron. Y después de la lectura de la ley y de los profetas, los principales de la sinagoga mandaron a decirles: Varones hermanos, si tenéis alguna palabra de exhortación para el pueblo, hablad.“Entonces Pablo, levatándose, hecha señal de silencio con la mano, dijo: Varones israelitas y los que teméis a Dios oíd.” Y inició su predicación histórica y recordó lo que el Señor había hecho con el pueblo judío,“ liberandolo de la esclavitud” egipcia, y la promesa de un Salvador descendiente del linaje de David. Pablo continuó disertando todo lo concerniente al plan divino.“Antes de su venida, Predicó Juan el “bautismo” de arrepentimiento a todo el pueblo de Israel. Mas cuando Juan terminaba su carrera, dijo: ¿Quién pensáis que soy? No soy yo él; mas he aquí viene tras de mí uno de quien no soy digno de desatar el calzado de sus pies.” Varones hermanos, hijos del linaje de Abraham, y los que entre nosotros teméis a Dios, a vosotros es “ enviada la palabra ” de salvación. Porque a los habitantes de Jerusalén y sus gobernantes, no conociendo a Jesús, ni las palabras de los profetas que se leen todos los días de reposo, las cumplieron al condenarle.“ Y sin hallar en él causa alguna digna de muerte, pidieron a Pilato que se le matase.Y habiendo cumplido todas las cosas que de él estaban escritas, quitándolo del madero, lo pusieron en un sepulcro. Mas Dios lo levantó de los muertos. Y él se apareció durante cuarenta días a los que habían subido con él de Galilea a Jerusalén, los cuales son <testigos> ante el pueblo. Y nosotros también os anunciamos el Evangelio de aquella promesa hecha a nuestros padres, la cual Dios ha cumplido a los hijos de ellos, y a nosotros, resucitando a Jesús; como está escrito también en el salmo segundo: Mi Hijo eres tú, Yo te he engendrado hoy.”