El Verbo de Dios

Cuanto a la diferencia de estilo, en comparación con el Evangelio y la Epístola, la diferencia de tema en parte la explica; las “ visiones del vidente,” transportado como estaba más allá de la región  de los sentidos, relatadas propiamente en forma abrupta de expresión, y li-  bres de las reglas gramaticales que rigen en sus escritos de carácter más calmoso y más pesado. Además, siendo como era hebreo gali- leo, Juan, escribiendo una Revelación semejante a las Profecías del  Antiguo Testamento, naturalmente volvió al estilo hebraeo de ellos.  El  escritor  Alford comenta entre los rasgos de semejanza del Apo- calipsis, el Evangelio, y las Epístolas de Juan: (1)  el nombre carac- terístico dado a nuestro Señor, como lo nombra Juan, “ el Verbo de Dios” (cap. 19:13, con Evang.  Juan 1:1; 1Juan 1:1. (2) la frase “ el que vence”  ( caps. 2:7, 11, 17 ; 3:5, 12, 21 ; 12:11 ; 15:2 ; 17:14 ; 21:7, con Evang. Juan 16:33 ; y 1 Juan 2:13, 14 ; 4:4 ; 5:4, 5). (3) El término griego (alethinos)  por “ verdadero”, en contraposición a lo que es oscuro e irreal (caps. 3:7, 14 ; 6:10 ;15: 3 ; 16:7 ; 19: 2, 9,11; 21:5 ; 22:6). Este término fué usado una sola vez por Lucas 16:11), y cuatro veces  por  Pablo (1 Tesal. 1:9 ; Heb. 8:2 ; 9:24 ; 10:22), se halla nueve veces en el Evangelio de Juan caps.1:9 ; 4:23, 37; 6:32; 7:28 ; 8:16 ; 15:1 ; 17:3 ; 19:35). Cuatro veces en la Primera Epísto- la de Juan (1 Juan 2:8, 5:20 ), y diez veces en el Apocalipsis ( caps. 3:7, 14; 6:10; 15;3; 16:7; 19:2, 9, 11; 21:5; 22: 6 ).(4) El diminutivo griego “corderito” ( arnión ) ocurre veintinueve veces en el Apoca- lipsis, y el único lugar donde ocurre es en el Evangelio de Juan cap. 21:15. Sólo en los escritos de Juan se le llama a Cristo directamente “Cordero” ( Juan 1:29, 36 ). En 1Pedro 1:19, se le llama “como un cordero sin mancha”, aludiendo a Isaías 53:7. Asimismo el vocablo “testimonio”(caps. 1:2, ; 9 ;11:17,  con Evang. Juan 1: 7, 8, 15, 19, 32 ; y 1Juan 1:2;4:14;5:6-11).“guardar la palabra o mandamientos” (caps. 3: 8, 10 ; 12:17 etc., con Evangelio de Juan 8:51, 55 ; 14:15). La aseveración de la misma cosa positiva y  luego  negativamente   (caps. 2:2, 6, 8, 13 ; 3:8,17,18;con Evang. Juan 1:3, 6, 7, 20 ; 1Juan 2:27, 28 ). Véase también, 1Juan 2: 20,27 con Apoc.3:18, en cuanto a la unción espiritual.Los solecismos aparentes de estilo son atribuí- bles a aquella elevación inspirada que está por encima de las reglas gramaticales, y están destinados a captar la atención  del lector por la cualidad de la frase, de manera que se “detenga y escudriñe algu- na verdad profunda” que pueda haber. El fervor del escritor inspira- do que trata un asunto que trasciende a todo otro, lo eleva por enci- ma de toda “adherencia servil a las reglas ordinarias”, de modo que  aveces pasa de una  “construcción gramatical”  a otra, conforme va  exponiendo “gráficamente”  la cosa descrita ante los ojos del lector. Esto no es  ignorancia de la  gramática, porque Juan ha  desplegado un conocimiento de reglas gramaticales en otras construcciones mucho más difíciles.