Resurrección y Ascensión

El repentino arresto y la rápida muerte de Jesús desconcertaron y abrumaron a los discípulos. Los Evangelios mencionan que al menos en tres ocaciones el Señor les había anunciado Su muerte y resurrección al tercer día; a pesar de ello, los discípulos se sentían demasiado frustrados en su dolor para tener alguna esperanza. Los que han conocido el abatimiento y la amargura de una desolación completa no se asombran del comportamiento de los discípulos, ni dudan del relato evangélico. Los Evangelios no pretenden dar una relación total de los hechos, ni un libro de pruebas de la resurrección. Son un testimonio de la realidad por el testimonio de los apóstoles, y muchas gentes, las cuales también Cristo se les apareció en varias ocaciones (Lc.24:13-35). Los Evangelios han registrado aquellos hechos que tienen interés íntimo, aquellos que Dios quiere que todos conozcan.